El Gran Ataque al Clan de la Hiedra pasó cuando ella y sus hermanos aun eran cachorros. Su madre, Sol Risueño, muere en el ataque, y dejan por muertas a sus crías. Después de esto, fueron adoptados por Vuelo de Alondra y Pelaje de Avena. Sus hermanos no recuerdan mucho sobre el ataque, pero ella sí, y piensa mucho en ello.

Crecen muy unidos, ayudándose mutuamente cuando necesitaban un pequeño empujón o algo de consuelo.
Cedar llegó al Clan mientras ella era aprendiz. Fue una de las aprendices que más asignaban a ayudar a cuidarle, por esto se volvieron amigos muy fácilmente.

Ya siendo guerrera, escuchó de una patrulla que parecían haber miembros del Clan de la Sangre cerca del territorio, y se ofrece voluntaria para investigar más sobre ello con algunos otros. Sin embargo, con solo ver los gatos, ella atacó directamente ardiendo de furia y la mataron.
Vivió toda su vida centrada en la venganza, sin sentir mucha lealtad por su Clan.

Es más leal a gatos en concreto del Clan que al Clan en sí. Le dirige su sentido de la lógica, que es lo que le ha mantenido viva cuando otras cosas le fallaron.