Shiro

Kassbelle

Info


Created
7 years, 3 months ago
Creator
Kassbelle
Favorites
6

Basic Info


NOMBRE

SHIRO

GENERO

MASCULINO

EDAD

2 AÑOS

CUMPLEAÑOS

15 DE JULIO

ZODIACO

CANCER

ALTURA

100 CM COMO CONEJO - 1.78 CON FORMA HUMANOIDE

CASA HOGWARTS

HUFFLEPUFF

Profile


Personalidad:  Shiro es un monstruo/pesadilla de dos años que cambia de formas al tener un cuerpo onirico, sin embargo sus formas predilectas son las de un conejo blanco o bien la de un joven...a pesar de que su edad mental es la de un niño. Actualmente se encuentra preso con cargos por abducion de infantes y esta atrapado dentro de su forma más basica, la del conejo c: <3

Shiro se preocupa mucho por las personas que quiere y las procura lo más que puede, es considerado, atento y amable hasta el punto de ser considerado tonto o inocente.
No suele pensar mucho las cosas antes de decirlas y su bocota le puede ganar problemas...claro, eso y su impulsividad. tapoco tiene muy desarrollado el sentido de: "lo que es bueno y lo que es malo"  aunque lo esta aprendiendo.

No le gusta estar solo, esta tan acostumbrado a la vida junto a la señorita Emilia, su hermano Kuro y "los niños"...asi que es de esperar que busque compañia de cualquiera, basta con que sea medianamente amable con él.

Su hermano Kuro le describiria como: "El miembro estupido de la familia"...pues suele ser un "poco" sonso e infantil.

Breves detalles sobre el plano de Tenebris: 

Shiro fue creado no hace mucho, en un plano onírico conocido como Tenebris.

Como dice su nombre, este plano esta imbuido entre las tinieblas y telarañas de los malos sueños, de las angustias, desesperanzas y horrores que estos pueden causar en la infinidad de criaturas de otros planos, que se reúnen ahí en un sueño profundo del que muchas veces no están conscientes.

Tenebris es un mundo absurdo y etéreo, con regiones que pueden modificarse para todo tipo de características y preferencias de quien se encuentra atrapado en una pesadilla. En cada una de estas regiones, los habitantes pueden cambiar y adaptarse a la forma del objeto que causa temor al soñante. 

Este mundo, sin embargo, no se maneja solo y son “los señores del terror” quienes se encargan de preparar tanto el “escenario”, como a las criaturas idóneas con el fin de conseguir una buena pesadilla, para, de esta forma hacerse con la energía que mantiene a Tenebris “trabajando”.

 

 

Historia: 

La primera vez que estuvo consciente de lo que ocurría a su alrededor, no era más que un pequeño mal sueño a punto de desaparecer entre las manos enguantadas del “Bogeyman”, a quien escuchó decir a sus lacayos: “No tiene caso, deséchenla”

Tembló desolado, aterrado de su propio destino mientras sentía como su diminuto cuerpo, frágil como ceniza caía sin peso sobre las peludas y monstruosas manos del sirviente al que se limitaban a llamar: J.W

Miró de nuevo al Bogeyman, sin poder hacer más que rogar con la mirada, pero sus fríos ojos nebulosos no le dio esperanza alguna…y aun temblando, se resignó a que su existencia terminara en algún rincón olvidado de aquella sombría mansión. Sin embargo, la escuchó.

“Hermano, deja que yo le cuide…Kuro ha estado sintiéndose solo. Al parecer la gente sombra del carnaval, no es lo suficientemente interesante para él”

El repiqueteo de unos tacones le alertó sobre la cercanía de alguien a quien no había visto hasta ahora, pero por más que quiso estirarse, le fue imposible ver más allá del pelo rosa y brillante en las manos del niño monstruo, con quien instantes después intercambio una mirada fugaz.

“no hagas eso, te estas desmoronando” le amedrentó J.W con su gesto monótono que parecía ser el reflejo del profundo aburrimiento que embargaba al monstruo; y luego, comenzó a moverse. Mientras lo hacía la pequeña pesadilla alzó nuevamente sus ojos hacia el techo y de a poco, pudo verla.

Ella le estaba regalando una sonrisa gentil, aunque sus mirada pareciera afligida, apenada.

“Está bien, ya está bien…yo voy a cuidarte” murmuró ella con suave voz, mirando con sutil impaciencia a J.W, quien con cuidado, deposito a la pesadilla sobre las manos frías al tacto, pero cálidas en sentimiento.

La pequeña pesadilla quería seguir contemplando ese rostro, ese gesto amoroso que tenía la joven mientras lo acurrucaba con cuidado contra su pecho, pero un plácido sueño se apoderaba de él, estaba tan cansado que sus parpados caían con pesadez…pero tenía tanto miedo de que ese cansancio fuera la señal inminente de su muerte que luchaba contra su agotamiento, temblando y sacudiéndose.

“shh, shh…déjalo, te prometo que seguirás aquí y cuando abras los ojos de nuevo, yo también lo estaré” ….Y esas palabras fueron lo último que escuchó antes de desvanecerse.

Despertó días después con la sensación de haber dormido una eternidad. Miró hacia el techo, sintiendo un mar de susurros a su alrededor pero cuando entornó la vista hacia el costado para investigar que era, el silencio reino y casi le caló en los oídos

Miró a un lado y a otro, notando que la habitación estaba llena de muñecas y podría haberles prestado más atención de no ser porque algo en su propio cuerpo le resultó extraño….pesaba muchísimo, se sentía raro…Escuchó nuevamente un ruido un quejido que lo hizo quedarse estático por unos segundos…hasta que realizo que ese sonido había salido de él y lo intentó una vez más; su voz estaba quebrada y reseca…PERO TENIA UNA VOZ PROPIA! Y la alzó con ánimos para escucharse mejor…y luego ¿Qué era eso que se movía bajo las sabanas?...Brazos!?...Piernas?!...tenia forma!, Tenía un cuerpo como el de las pesadillas “mayores”

“No desaparecí!....NO DESAPARECÍ!” Celebró animado, impulsándose fuera de la cama pero yéndose de bruces al suelo cuando las colchas se enredaron entre sus nuevas piernas. Un coro de risillas inundó la habitación y encantado se dio cuenta de que había hecho reír a las muñecas.

Se quedó un rato ahí en el suelo, preguntado sin obtener muchas respuestas…parece que a ellas les gustaba reír y susurrar, pero no decían nada claro para que el pudiera entender. Y al cabo de un rato, una puerta se abrió y a la habitación entró ELLA, tan hermosa como la recordaba, con esa mirada piadosa fija en una muñeca que parecía a punto de romper en el llanto, meciéndola entre sus brazos con amor y cuidado.

Junto a ella venía alguien más. Un joven más alto que ella, de cabellos rebeldes, negros y con dos “divertidas” orejas largas, como de conejo…sobresaliendo de entre sus mechones.

“Tus orejas son de conejo!” espetó sin pensarlo dos veces, señalando al muchacho quien volteo a mirarle con gesto de poco agrado.

“Las tuyas también lo son” Contestó el otro sin mantener mucho interés y apresurándose para ir a buscar una mecedora que acercó a la ventana. “señorita Emilia…” dijo a la joven y esta se acercó aun con la muñeca en los brazos.

Emilia, Emilia, Emilia!...ese era su nombre!...se lo taladraría en la cabeza para jamás olvidarlo, pensaba la pesadilla mientras la contemplaba meciéndose y tarareando una canción de cuna…completamente encantado con todos los detalles de su rostro de niña y su vaporoso cabello.

“Shiro…” Murmuró al fin. Y aun cuando la pesadilla no supo de buenas a primera si le hablaba a él, notó con alegría que le estaba mirando, ahora que la muñeca había terminado por cerrar sus ojitos de porcelana. “Ese será tu nombre, Shiro…” continuó ella con una con una sonrisa para luego voltear a ver al de cabellos negros, que se había quedado a una distancia prudente de la mecedora, recargado contra la pared. – “Este es tú hermano, su nombre es Kuro…él te enseñara todo lo que necesites saber...se bueno y crece fuerte, Shiro"