About (en progreso)

   Su origen es un desconcierto para todos, si siquiera fue uno mas entre los mortales es algo que nadie puede afirmar con seguridad. Él tampoco sabe muy bien de donde salió, su memoria solo empieza de la nada... solo despertó un día sin saber nada, únicamente llevando consigo un libro que aparentemente solo él puede leer hablando sobre si mismo ¿tal vez lo escribió para si?¿fue alguien mas?  
Zötne salió de la separación de un dios mayor, aquel que tenia en sus manos el control sobre quien vivía y quien dejaba de existir. Se podría decir solo es una "marioneta", conservando parte del conocimiento de ese dios gracias al libro que le dejo.
  Estuvo siglos vagando por dëjina, al inicio el no saber nada de si le perturbaba; solo estaba seguro de que ver su rostro lo emputaba, siendo aun peor al ser lo único en su apariencia en no poder cambiar, empezó a cubrir sus ojos para no verse. Aun si por eso era incapaz de ver, las almas que merodeaban a su alrededor siempre lo acompañarían guiándolo y remplazando a su visión.

  Un día como cualquiera estaba en una fiesta de té solo él y sus almas o eso se suponía, guiado por bestias que correteaban por el bosque llego una niña. Zötne estaba algo sorprendido era la primera vez que veía un monstruo mortal, estaba acostumbrado solo a interactuar con las almas teniendo miedo que si se acercaba a algo mas podría matarlo como había pasado con algunas plantas en el pasado. Consumido mas por la curiosidad invito al otro a unirse a su fiesta. Esa fue la primera de muchas fiestas de té que hicieron.
  Los años siguieron pasando, Zötne cada día se apegaba mas a aquel monstruo. La primera vez que fue capaz de sacarse la venda y verle no dejo de alagarle. Comenzó a quitarse la venda mas seguido le gustaba observarle, siempre le mencionaba lo mucho que le gustaba el que sus colores le hicieran parecer dos personas que su unieron.
De la noche a la mañana utilizando su poder cambio su apariencia para tener alas como las de ella, le gustaba molestarle con que ahora era como si tuvieran una de las alas del otro ademas de verse geniales(?). Ella empezó fue quien le dio su nombre diciéndole le quedaba perfecto al ser como la luna, siguiéndole a todos lados encargándose de cuidarle.
Pero los mortales no son eternos, desconociendo su poder no pudo evitarlo, al final los mismos de su especie terminaron por llevársela.

  Paso mucho tiempo antes de que volviera a interactuar para bien con un monstruo humano y mucho mas para volver a utilizar el nombre que le dieron en el pasado.
El siguiente en ganar su confianza fue Aysël, uno de los primeros monstruos en ser catalogado como dios y la primera persona que conoció a parte de él mismo, y alguien mencionado en el libro, que poseía inmortalidad. Aysël en un inicio era reacio a socializar con Zötne pero nadie es capaz de escapar de la luna, Zötne siempre estaba ahí rodeado de unas cuantas almas junto a su taza de té esperándole para hablar; ni siquiera Aysël pudo evitar caer en sus insistencias volviéndose usual que incluso le prestara sus poderes para la diversión del falso alado.
Derivado de su amistad con Aysël, mas temprano que tarde termino conociendo a Diya. Su relaciona no era mala o así lo veía Zötne, aunque el contrario si no fuera por mantener las apariencias le habría arrancado las alas mi bien pisara su templo. También tenían sus momentos de buenos amiwis, ayudándole a elegir regalos para Aysël o contándole cosas sobre este, cosa que Diya valoraba mucho.

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    Hubo una época donde se volvió normal en algunos pueblos el sacrificar algunos de sus miembros ya sea creyendo que les daría beneficios  simplemente querían deshacerse de ellos, esto a Zötne le daba bastante igual él solo iría a buscar las almas que quedarían y luego solo seguir su vida como siempre.
Solo intervino una vez para salvar a uno de los sacrificados; Hubo algo en Eider que le recordó al primer monstruo que conoció. Pensar si era o no un acto malvado le fue innecesario, él lo había salvado así que su vida le pertenecía.
   Usando magia le hizo creer era aquella persona y utilizando eso lo retuvo a su lado. Esta vez haciendo que su condición de mortal no fuera a separarlo de él, o al menos intenta que no sea asi 

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Aysël

amiwis

Es lo mas cercano a una familia que tiene, aun si el no-entendimiento a veces es mutuo no deja de adorarle.
Le gusta tener fiestas de té con él, siempre sale alguna charla interesante de sus peleas con las almas 

Diya

amiwis

No puede evitar verlo como un tierno niño, poco mas y cuando lo vea le jalara las mejillas hasta que se le caigan.  En algunas ocasiones le gusta molestarle; en otras lo aconseja como puede, poniéndose en plan hermano protector

Eider

¿pareja?

Aun si pueda ser en el fondo un "remplazo", es feliz teniéndolo a su lado. No sabría que hacer si volviera a perderle otra vez