No sabía realmente que habrá podido ser, de por si cualquier pequeño descuido hacía que la comida se volviera mierda de un momento para otro. El dolor era similar a los que daba la gastritis, un ardor bastante molesto y, para su sorpresa no fue la única afectaba.

Le sugirió a Dylan pedirle algo a Norman para un alivio rápido, a pesar de que tuviera una mala visión del mayor aun confiaba en el como médico ¿qué malo podría pasar? Podría tomar algo de las plantas que había estudiado en clases, sin embargo no quería arriesgarse, además esto iba a ser más efectivo.

Una vez tomo los medicamentos notó que se había quedado sin agua.

— oye ¿me acompañas a llenar mi cantimplora? — Le preguntó al chico.

Para su mala fortuna, los días tranquilos se habían ido por el caño.

No recordaba exactamente qué clase de comida había ingerido en esos días, puesto que esa información generalmente no la guardaba en su mente y le importaba cuatro kilos de zanahorias, sin embargo, no pudo evitar sentir un insufrible dolor y ardor en el estómago, el cual le hizo retorcerse varias veces en lo que llevaba de día.

Reaccionó con cierta inquietud e incertidumbre ante la idea de Su Hua, puesto que no veía factible pedirle algo a Norman a esas alturas, había visto de lejos cómo el pobre chico estaba decayendo en todo ámbito, por lo que no sabía si sería una decisión buena o no. Pero como no tenía más remedio, aceptó.

—Ugh... —Sostuvo su panza una vez más, y viendo cómo la contraria se acercaba a él, alzó la cabeza con un asentimiento breve —Quizás caminar un poco alivie esto.

Le hizo una señal para que le esperara, rápidamente fue a buscar la cantimplora que había dejado en cierto lugar del campamento y volvió a donde estaba Su Hua, dándole otra señal para que avanzaran hacia el lago más cercano.

—¿Norman ya te dio alguna mierda para el dolor? —Preguntó con un atisbo de molestia.

Esperó que el chico buscara su cantimplora mientras intentaba pensar en cualquier otra cosa menos en el maldito dolor de estómago, pero ugh, era difícil de ignorar.

— Si, la tengo aquí, hay las indicadas para ambos — Abrió su palma para mostrar algunas cápsulas, solo quedaba buscar el agua, tomarlas y ole, que la ciencia haga su efecto.

— Apúrate — Después de todo quería deshacerse del dolor lo más rápido posible.

Una vez en el lago le entregó la medicación a Dylan y tomó ella las suyas, suspiró haciendo una mueca, odiaba tomar medicación, pero odiaba más tener que aguantar lo delicado que es el cuerpo humano

— Como dijiste, deberíamos dar una vuelta, así aprovechamos para monitorear un poco — No quería quedarse quieta, sentirse mal siempre la ponía algo ansiosa.

Esbozó una mueca de fastidio, detestaba que lo apuraran y juraría que en otro momento se habría demorado más sólo para molestar, sin embargo, aquella no era la mejor situación para hacerlo, de todas formas, necesitaba estar mejor o moriría algún día de esos por el dolor paulatino.

—Me pregunto qué tendrá esta mierda... —Murmuró para sí mismo mientras veía la medicación, alzándola en lo alto.

Procedió a agacharse y llenar su cantimplora en el lago con suma rigurosidad. Aún se encontraban relativamente cerca del campamento, por lo que la idea de Su Hua se veía tentadora para pasar el dolor.

—Hm —Asintió y comenzó a caminar haciéndole una señal para que estuviera cerca —Hm... ¿Segura que Norman confirmó que esto quitará el dolor...?

No quería parecer desconfiado, pero, ¿Por qué algo le decía que tomarse una pastilla de dudosa procedencia mientras caminaban por la segunda capa se veía como un pésimo plan?

Mantuvo el ceño fruncido por un largo rato. Finalmente, se retractó.

—Bueno, de algo hay que morir —Dicho esto, se llevó la pastilla a la boca y la ingirió con una cantidad grande de agua de su cantimplora.

Ella ni se preguntaba que tenía, después de todo apenas y sabía de medicina, pero gracias a las indicaciones de Norman fue capaz de ayudar en la extracción de su ojo, así que lo ve como un buen profesional. Tampoco es alguien que se fije mucho en los demás como para imaginar que anda mal más alla de lo físico. Aunque aun lo juzgaba un poco por caerse?... ni siquiera sabe por que tiene el brazo así. pero si cayó lo ve algo muy suyo(?

— ¿eh? Pues, es el médico, sabe que nos está dando...¿por qué dudas? — Ahora que Dylan preguntaba era su momento de ponerse paranoica ¿y si las confundió sin querer? siendo tan distraído ....nahh

— Está alerta de no irnos muy lejos, no quiero encontrarme con alguna de esas cosas con tentáculos infectados — Siempre que las recordaba le daba un escalofrío.

—¿Por qué dudo? Porque... —Alza su puño y fue subiendo sus dedos mientras enumeraba sus argumentos —...Tiene sólo un ojo bueno, ha recibido un montón de golpes en las batallas que hemos presenciado, se desmaya seguido, ¿Es un manojo de nervios andante?, y ha estado distraído estos días por lo que vi.

Terminó cruzándose de brazos.

—Bueno, no es como si pudiéramos hacer mucho —Se encogió de hombros —Ya me tomé la pastilla y no hay más médicos disponibles de momento.

Había tenido la fugaz idea de preguntarle a Eryn sobre las pastillas, pero no la conocía del todo ni le apeteció buscarla dentro del campamento. Terminó por dejar las cosas así, aunque posiblemente en unos minutos más su mente le atosigaría de dudas y preguntas, como siempre.

—Vale —Exhaló por la nariz, guardando sus manos en los bolsillos de su pantalón —Quedémonos cerca del campamento, entonces.

...Si, Dylan tenía su punto, pero aun así ¿Qué otra opción tenía? No sentía tanta confianza con Eryn, aunque la haya abrazado..."que vergüenza recordarlo"

— Se que no es el mejor, de por si a veces me pregunto por qué Atreia lo tiene como su ayudante, sin embargo sigue siendo un profesional. No quiero desconfiar ¿Entiendes? Igual si se llegara a equivocar lo minino que se ganara de mi parte es una patada en las bolas — Exclamó la suave flor.

— Y otro médico es Eryn, pero no quise molestarla — suspiró — Como sea, no pensemos en eso o nos vamos a sugestionar a este paso — Hizo un vaivén con la mano como queriendo cambiar de tema, solo la estaba poniendo nerviosa.

— ¿Hablaste con alguno de los nuevos? — Preguntó con curiosidad para hacer algo de charla, quería saber si de causalidad había hablado con el chico de lentes, es el único que no ha analizado (?

Chasqueó la lengua con fastidio y le dio la razón, también se animaría a darle una patada si surgía la posibilidad.

Sin embargo, también sentía que no era del todo apropiado realizar aquella acción tan malévola, dejándose llevar por el enojo de la situación. Si bien él mismo no era la persona menos rencorosa del grupo, sentía cierta pena y preocupación por Norman.

A pesar de que su forma de ser no le agradaba, no era un mal chico, tan sólo era una pobre víctima de las circunstancias de otros.

Asintió, lo mejor del momento era no seguir pensando en aquello, aunque su potente mente llena de pensamientos obsesivos y ansiosos le dirían lo contrario unos segundos después, cuando el tema volviera a su mente como un bucle hasta encontrar otra situación en la que colocar atención. Esperaba que pasara esto último.

— ... —Dejó pasar un leve silencio —¿...Debería hablar con los nuevos...? No me interesan en lo absoluto.

Fue totalmente sincero, no le apetecía conocerlos, le bastaba con verlos de vista y ya.

—Ah, había llegado alguien más antes hace unas semanas, ¿No? Bien saberlo.

Bueno, teniendo en cuenta que Dylan no era la persona más sociable del mundo no debería sorprenderle, más bien era sorprendente para ella haber hablado con casi todos, aunque cada uno tenía su razón de ser: Osamu bueno... Más que hablar lo puteo y se fue, ni más ni menos. Chenge es su primo, y Elise hizo de peluquera desafortunada, aunque por suerte supo arreglar sus pecados.

Resoplo como si fuera a reír — Claro, normal que no hayas hablado con ninguno —

Aunque, ni siquiera se había fijado en ellos tal parece, porque era básicamente "los nuevos" ni siquiera hacía distinción. "A si, se unió uno antes que estos tres" Y pensar que ella se sentía asocial, pero Dylan estaba en otro nivel donde pasaba completamente de la existencia de ellos ¿No debería importarle aunque sea un poco? No sabemos si harán bien o mal al equipo, había que estas alerta "niño estúpido".

— ¿Hablas de mi primo? Es el chico del cual te hablé en la primera capa, al parecer el abismo no fue lo suficientemente grande — Aunque ya tenía pocas esperanzas de que si quiera se acordara

Tenía entendido que tres personas se habían acoplado hace unos días atrás, junto con otra persona hace ya un par de semanas. Al menos mantenía el conteo de las personas que se iban sumando, aunque, ¿Por qué sentía la sensación de fastidio de gente totalmente desconocida integrándose? Lo sentía distinto a los actuales miembros, no podía evitar sentirse incómodo mas sin embargo esa molestia era totalmente estúpida de decir.

—Hmp. —Fingió indiferencia, posiblemente Su Hua lo estaría juzgando mentalmente, pero le daba igual.

Ante el comentario de la chica, se detuvo abruptamente y miró al piso unos momentos, intentando cavar en lo más profundo de sus memorias. Posiblemente la pastilla le había dejado algo dopado, porque no recordaba actualmente lo que hablaba Su hua.

¿...Primo de Su Hua...?

¿Le contaron en la primera capa...?

¿Abismo muy grande...?

...

¡Oh!

—Ah... ¿El tal Fei... Fei lechugalenche o algo así? —Se cagaba ahora mismo en sus ancestros por los posibles nombres indescifrables que tenía la familia de Hua —Vaaaaale, ya recuerdo. No me había percatado que se había unido tu primo, ¿No que estaba con una mocosa o algo así?

Se giró para verlo procesar sus ideas, incluso se cruzó de brazos y contó los segundos mientras el software volvía a funcionar. Bueno al parecer algo se acordaba... pero ¿lechugalenche? Dios, era tan ridículo, le hizo recordar cuando hablaron por segunda vez, pero a estas alturas sabía que no era una broma, simplemente apenas se acordaba.

— Chen-ge ¿Qué te pasa con nuestros nombres? Se que son extranjeros, pero tampoco son tan difíciles — dijo como si estuviera indignada al respecto, aunque cuando nombro a la mocosa bajó los brazos rascándose luego un poco el cuello.

— No sabemos donde se encuentra, yo sinceramente la doy por muerta, pero prefiero pensar que debe andar revoloteando sana y salva por ahí, o el idiota va a estar destrozado por ser un mal hermano de a mentís — Igual no era cosa de Chenge si la mocosa se separó de él, no es como si fuera una nena de 5 años, si está viva tendría que aguantar las ganas de no meterle un golpe por irresponsable, si están juntos tenían que permanecer juntos, si murió es culpa de ella, fin.

Ojala fuera tan sencillo.

— Si ves algún movimiento extraño dime, quien sabe, podríamos encontrarla en el camino — suspiró.

Retomó la caminata, pero se detuvo porque la cabeza le empezaba a doler, por lo que buscó su cantimplora para beber un poco, tal vez era cosa del dolor de estomago de hace rato y que la pastilla no había hecho efecto del todo.

Se rascó la nuca, asumiendo internamente su error con bastante pena.

—No pasa nada... —Titubeó un poco, imitando luego su cruce de brazos —Chenge, sí, Chenge. No lo olvidaré otra vez, te lo prometo.

Aunque algo en su interior le decía que olvidaría de nuevo el nombre. Momentáneamente quedó en silencio repitiéndose el nombre varias veces en su mente para no olvidarlo, seguramente si veía a Chenge con mayor detenimiento será más fácil recordar su nombre.

Retomó su caminar a la par de Su .

—Ah, ¿Seguirá viva? Dudo que esa criatura del campamento de observación sea la única en la capa —No quería bajar las esperanzas, pero debía ser una mocosa muy afortunada y talentosa como para sobrevivir por sí sola en la segunda capa, y más tras varios días.

Fue disminuyendo los pasos al ver que la contraria buscaba con rapidez su cantimplora. La observó extrañado, deteniéndose una vez más.

—¿Qué pasa? ¿Incrementó el dolor? —Por su lado él se encontraba bien de momento, aunque el dolor de estómago no se lo quitaba nadie.

— hmm tal vez se acerque a hablarte en algún momento, tiene curiosidad de conocerte — "Quiero ver quien es la única que te soporta" Fue lo que realmente dijo, pero no era algo que sentia que debía agregar (? Tambien había dicho que tenía la leve sospecha de haberlo conocido antes, aunque no le quiso dar más detalles

— Eso es lo que más me preocupa, esa corrupción que vimos debe estar en otros lados de la segunda capa seguramente, hace que su posibilidad de sobrevivir baje. Esperemos que se sepa esconder y no meterse en donde no debe, o esta frita — Mínimo quisiera encontrar su cuerpo si pasaba lo peor, pero estando en la misión sentía que la única forma de encontrarla era viva.

— Eso parece... Igual no habrá pasado ni 20 min, debo esperar a que haga efecto la cosa esa — Suspiró algo frustrada — Ojala saber que mierda comimos para no volverlo hacer, se siente del asco

—Hmmmmmm. Ok. ¿Y eso por qué? ¿ ?

No sabía a qué venía eso exactamente, ¿Curiosidad? Habían más personas dentro del grupo que eran mejor y más interesantes de conocer. Si bien le intrigó el motivo, al mismo tiempo le llenaba de incertidumbre e inquietud.

—Hubiéramos encontrado su cuerpo, no sé —Expresó pensativo —¿Ya le notificó a los guías? Supongo que sí, en ese caso, sólo queda esperar.

Suponía que si seguían caminando, el efecto de las pastillas llegaría un poco más rápido o el tiempo pasaría más velozmente haciendo vigilancia del sector. Esperó a que la contraria se moviera para retomar su camino nuevamente.

—¿Ves? Para la siguiente ocasión me aseguraré tres veces y le preguntaré a Eryn —Cruzó sus brazos con molestia —Vale, ¿Qué te apetece hacer? ¿El dolor es muy fuerte para sentarnos un momento o seguimos caminando?

— Siente que te conoce de algo, pero no me quiso decir más ¿A ti te suena su cara? —

Dudaba si quiera que se hubiera fijado en él, pero no estaba de más preguntar(?

— Si, ya se notificó — A lo otro simplemente encogió de hombros, no había mucho que hacer con respecto a ese tema más que seguir "buscando" dentro de las posibilidades que tenía ella y Chenge y ver si la mocosa había tenido suerte al final...Y luego patearla por hacer pasar aquel disgusto a su primo

— Si, supongo que a la otra es mejor preguntarle... Ah, que mierda. Si, vamos a sentarnos un momento — le pidió al chico y fue a buscar un lugar cómodo para que se sentaran ambos, ni lo esperó mucho, simplemente se acomodó en algún árbol donde pudiera apoyar la espalda y se masajeo un poco la sien.

—Para nada.

Frunció el ceño, ¿Quizás el tal Chenge lo conocía en Orth? Aunque le parecería un detalle bastante extraño, no recordaba a nadie en la ciudad más que algunos vecinos con los que intercambió palabras banales y formales.

Sentía bastantes dudas, aunque prefirió dejarse llevar por la idea de que sería un malentendido y ya, a menos que sus memorias perdidas le estuvieran jugando en contra una vez más.

...

Vale, no pienses más sobre aquello, Dylan.

Dirigiéndose hacia un lugar cómodo, procedió a imitar los mismos movimientos de Su Hua, apoyó su espalda en el tronco del árbol a un lado suyo y esperó a que la contraria le dijera que estaba mejor.

Sin embargo...

Por asuntos del destino, comenzó a sentir un leve dolor en el pecho que iba incrementando muy lentamente, por acto reflejo llevó una de sus manos por encima de su caja torácica. Haciendo presión en la zona, notó que sus latidos habían aumentado de improvisto.

—Qué mierda, ¿No te duele el pecho? —Le preguntó a la chica, si ambos estaban con el mismo dolor y mismos síntomas en su mayoría, quería sacarse de dudas si era producto del dolor estomacal o, en consecuencia, su ansiedad.

Ella realmente no pensó mucho en el tema, si se conocían o no ya era cosa de que lo comprobaran entre ellos, pero vaya, si es el caso, que pequeño era el mundo a veces.

Aquel movimiento brusco a la hora de sentarse la había mareado un poco, sus ojos se mantenían cerrados mientras estaba masajeando su sien. El ritmo cardíaco había empezado a aumentar también en su lado, haciendo que frunciera el ceño un poco ¿que coño?

— hmm...un poco. Esto no tiene buena pinta ¿que mierda comimos? — Por ahora aún no relacionaba la medicación con aquellos síntomas tan extraños. Terminó por llevar también su mano al pecho, la taticardia era obvia, cosa que le estaba asustando.

— Creo que deberíamos volver — Dijo concentrada en su cuerpo, esto no era normal en un dolor estomacal.Intento buscar tomar algo de agua, pero sus brazos se sentían algo débiles, chasqueo la lengua al inicio ignorandolo, la frustración le daba un estado de negación (?

La observó alzando una ceja con bastante obviedad.

—¿Ves? ¿Qué te dije? ¿¡Ah?! —Subió su mirada a lo alto, colocando sus ojos en blanco —Puta mierda, si me muero por una estupidez le jalaré los pies al tuerto ese desde el infierno.

Llevó sus manos a su cabello y los peinó hacia atrás con notoria molestia. Si aquellos eran los síntomas de la pastilla, posiblemente quedaría frito en un par de minutos más. Por primera vez en mucho tiempo, quiso haberle hecho caso ciegamente a su instinto.

Paulatinamente fue sintiendo como si su mente girara en los alrededores de la vegetación en la que andaban. Por suerte, su espalda estaba apoyada en el tronco y podía sentir su cuerpo más estable, sin embargo, cada vez iba siendo menos soportable y más molesto.

—Ugh, espera... —Bajó un tanto la cabeza, sentía su cabeza palpitar y los hombros pesados. Terminó sentándose en el suelo por el dolor en sus sienes —¿Estamos muy lejos...? ¿...? Ah, dónde puñeteras estábamos...

— En mi defensa lo normal es ir a acudir a Norman, no es culpa mía — Y es lo que pensaba, el chico es el médico del grupo más experimentado, era normal pensar en el de primeras, aunque ahora se lo iba a pensar dos veces sin duda.

— Somos dos...Pedazo de inútil tuerto — Refunfuñó, sin duda luego de esto tendría que aguantarse demasiado para no querer matar a Norman. Pensar que lo mejor era haberle hecho caso a Dylan

Levantó la cabeza para observar el lugar, sintiendo como aquel gesto tan simple le había mareado un poco, sus párpados pesaban ligeramente y la cabeza seguía palpitando. Intentó respirar profundo en un inútil intento de calmar los síntomas.

— No estoy segura, igual no creo que estemos tan lejos, de por si no caminamos demasiado... Sería retomar el camino por donde vinimos — Cerro los ojos y pego su cabeza al tronco — Aun así, no tengo ganas de levantarme del suelo. Esperemos un momento a que pase el mareo, para ir a patearle las bolas a Norman...Esto tiene que ser cosa de las cápsulas si o si — Con los ojos cerrados intentaba pensar que hacer, los efectos secundarios estaban siendo muy agresivos de por si y no sabía que podía esperar de ellos, lo que era claro es que en aquel estado eran un blanco fácil.

— No quiero ser comida por andar drogada, seria una muerte muy patetita — Comentó con pesar. Si moría quería que fuera en batalla o por alguna acción cool de su parte, no porque un pendejo nervioso se equivocó en su botiquín

Encogió marcadamente sus hombros, no quería seguir rodeando el asunto y que se convirtiera en un súbito dolor de cabeza después. Se conocía bien como para prever eso.

—¿No habíamos caminado demasiado...? —Se preguntó a sí mismo en voz alta, puesto que para su percepción personal, sentía que habían transitado por el lugar durante varios minutos — A. No me acuerdo del camino de regreso. Bueno, nada que hacerle.

Se encargaría de que el Dylan del futuro se preocupara por eso.

Le dio la razón a la contraria, porque si fuera él se quedaría todo el resto del día apoyando su espalda en el tronco y dormitando brevemente. Si no fuera porque en el sector habitaban criaturas peligrosas y aún no entrenaba lo suficiente para enfrentarlas por sí solo, se echaría en el pasto toda una tarde.

Los síntomas se iban atenuando cada vez más, pero a diferencia de hace unos momentos, parecía como si lentamente cayese en una especie de sensación de ensueño y dejase los demás dolores totalmente a segundo plano. Le pareció curioso.

—Yo esperaría morir de manera más genial, sería horrible fallecer luego de ingerir una estúpida pastilla equivocada y siendo engullido por una criatura por imbécil —Comentó en respuesta de la contraria —Hm... ¿De qué manera podría morir...? —Comenzó a pensar mirando cierto punto fijo en el paisaje —Ojalá no cayendo de un risco o a un lago. No. No. No. Patético.

— ¿De qué manera? — Aprovechó para pensar también, realmente es algo que había pensado antes, las razones de por qué esa idea había venido a su mente variaban dependiendo de la época.

— No quiero morir ahora — Terminó por coincidir consigo misma — Quiero bajar...bajar y bajar, dejarme engullir por el abismo hasta donde las capacidades de este grupo improvisado terminen —

Era así, a pesar de los miedos, a pesar de la desesperanza de los nuevos descubrimientos, el abismo lograba darle aquel choque de energía que le decía "sigue, sigue, sigue hasta que mueras" Porque realmente allá arriba no había nada que le animara a seguir, ni siquiera su propia familia, aunque cruel, era una realidad en su mente.

— Ojala pudiera hacer algo importante mientras bajamos y que mi padre sepa de mi gracias a eso... Sería un buen regalo luego de haberlo abandonado... Me pregunto si me odiará — Sus pensamientos saltaban de una cosa a otra, su cuerpo se adormecía al igual que su mente y solo dejaba fluir lo primero que se le venía a la mente, totalmente contrario a lo que podía pasarle cuando estaba en sus 5 sentidos.

— Luego de hacerlo, incluso me dejaría morir de la manera mas tonta posible ¿tal vez podría suicidarme? ¿o habrá algo en las profundidades que me de otra razón de vivir? — Se cuestionaba el futuro incierto.

Asintió con lentitud, puesto que intuía que dentro de todo,nadie quería morir dentro de ese grupo de descenso.

Pese a que por su lado también sentía cierta intriga por las profundidades del abismo, no era con tanta intensidad como había plasmado Su Hua en sus palabras, por lo que sintió un poco de motivación tras escuchar sus palabras llenas de determinación.

—Dudo mucho que te odie —Comentó desde su plena ignorancia, habiéndose tomado un tiempo para responder aquello mientras mantenía su mirada puesta en un punto fijo del paisaje.

Un buen regalo luego de abandonar a tus seres queridos, ¿No? Se preguntó cómo se sentiría, no podía evitar limitarse a pensarlo a través de las mascotas callejeras de la plazoleta.

Pese a que la sensación estaba envuelta en una soledad agria y oscura, no había pensado que bajar al abismo estando con personas que no sabían su historia de vida le traería tanta paz consigo mismo. Sí, no es que todos le caigan lo suficientemente bien, pero era una molestia menos. Se sentía genuinamente tranquilo.

No sabía si era algo bueno o malo, encontrar paz en un lugar que no aseguraba tu vida parecía ser como una gran ironía de vida.

Se tomó un tiempo en responder a la primera pregunta.

—Aborrezco mucho el agua, ¿Sabes? —Comentó viendo sus manos —Si muero ahogado, creo que será una ironía gigantesca del destino. Tampoco me gustan las alturas, la profundidad me suele hacer sentir incómodo.

Cerró momentáneamente los ojos, sin saber siquiera lo que su boca expulsaba.

—No quiero morir solo. Es todo. Si hubiese alguien que me acompañara hasta mi último respiro, creo que estaría bien.

A pesar de que comentaba algo tan deprimente como eso, su semblante de calma no se había borrado.

—Hay que continuar, ¿No? —Eran palabras que a menudo repetía en su mente —Seguramente haya algo abajo que nos haga seguir... ¿Como un tesoro grande? ¿Una ciudad llena de oro? O quizás... ¿Un gato?

Ante lo último, no evitó esbozar muy sutilmente un ápice de sonrisa.

Miró un momento al cielo, aunque la copa del árbol le impedía la visión y el movimiento terminó mareándola más de lo que quería. Terminó por llevar su mano a la frente antes de bajar de nuevo su cabeza riéndose un poco.

— Espero tengas razón, siendo alguien tan cerrado a veces me daba miedo imaginar que pensaba de mi — Lamentaba un poco que a pesar de no ser una mala relación tampoco fue buena en ningún momento, seca, tal vez por el cierto resentimiento que sentía, tonto e injustificado, después de todo la mayor culpable de la ruptura familiar era su madre.

Agradecía que la conversación fuera hacía otro lado, hacía el futuro, alejando la nostalgia de todo dialogo siguiente.

— ¿El agua? — Se le hizo un hecho curioso, dejándola pensar un poco ¿En que sentido? Sin embargo antes de decir cualquier cosa dejó que siguiera hablando.

— Oh, ya entiendo...hmm. Siento que es algo justificable, el agua es más fuerte de lo que se deja ver — Sentía que algunos verían aquel miedo algo tonto, pero estando en una isla sentía que la mayoría debía aprender a sentir respeto por la profundidad, y ni hablar teniendo el abismo.

— No morirás solo... Estamos aquí para acompañarnos ¿verdad? Somos recién conocidos, pero las circunstancias hacen que tengamos que aguantarnos todos los días ¡aparte me caes bien! puedo acompañarte — Terminó por optar en acostarse en el pasto, aunque acomodándose para poder ver a Dylan sin problemas.

Soltó una risa ante lo último.

— Que estúpido, bajar por un gato... hmm yo — ella...ella ¿qué? ¿Qué esperaba realmente del abismo?

— No tengo ni puta idea de que esperar allá abajo, pero ojala valga la pena, que es horrible tener que estar lleno de sangre porque no hay algún lago cerca para bañarte — No le había pasado particularmente, pero la idea le daba ñañaras, como cuando Eryn llegó cubierta de sangre aquella vez.

— Hmm tal vez la pastilla si servía para algo, me siento en una nube — Aun le dolía algo el estomago, pero aquella sensación era opacada por la debilidad y delirio de la situación.

— Entonces ...Entonces ¿si aborreces el agua? ¿no te bañas? — Era duda genuina, si bien pensaba que era algo profundo no quería simplemente asumir(?

Le sorprendió aquel comentario viniendo de la contraria, pensaba que era de ese tipo de personas que le daba igual lo que pensara el resto de ella. Podría ser así de todas formas, era algo que no sabía a ciencia cierta si lo aplicaba tanto a desconocidos como a familiares también, tan solo le pareció un detalle curioso.

—Me habías dicho que llevas estudiando hace años y bailas, ¿No? ¿Por qué te daría miedo lo que piense de ti? —Cuestionó —Lo que menos debe hacer es odiarte. No sé.

Hablaba desde su total ignorancia, ¿Y si el padre de Su Hua resultaba ser una peste similar a su tío? Esperaba que no fuera el caso, no le deseaba a nadie pasar por un ambiente de ese tipo.

—Hm —Respondió en confirmación a su pregunta, sin especificar más al respecto.

Observó de reojo a Su Hua al escucharle decir que no moriría solo. Esas palabras le generaban mucho conflicto interno, suponía que lo decía porque tarde o temprano alguien se tendrá que encargar de los futuros cuerpos muertos y serán testigos de las muertes de cada uno.

Aunque al haber escuchado que le caía bien a Su Hua le hizo inevitablemente colocar un semblante pleno de confusión y desagrado.

—¿... Y eso por...? No es como si fuera la persona más agradable —Le pareció un poco adorable que se prestara para acompañarle, pero no sabía nada a ciencia cierta, su mente era una total vorágine de pensamientos contradictorios y dudas de saber a quién acercarse. No sabía tampoco cómo tomarse aquellas palabras, así que respondió como solía hacer casi en automático: —Ok.

Resopló por la nariz y se cruzó de brazos, mirando cómo la chica se acostaba en el pasto.

—Oh, yo también me siento como estar en una nube, es... extraño —Volvió a cerrar los ojos. Efectivamente, era como si sus piernas y brazos se sintieran como plumas —Se siente... ¿Agradable? Espera, ¿Cómo sabes cómo se siente estar en una nube? ¿Has estado en una? Hmmm, a mi igual me gustaría...

Comenzó a divagar en sus pensamientos, llevando la mano a su mentón como si estuviera realizando un cálculo matemático profundo.

Al momento de apoyar su cabeza en el tronco del árbol, empezó a darse pequeños golpes en el mismo en la nuca mientras mantenía los ojos cerrados.

—¿Eres tonta? Claro que me baño, olería a mierda si no —Comentó con gran obviedad —Tuve que acostumbrarme de alguna manera, no puedes vivir sin bañarte a menos que seas una vagabunda.

Ya había tenido un golpe de sinceridad antes con Dylan, así que estando en aquel estado adormilado y perdido era más fácil que soltara la lengua.

— A veces no conoces a la gente lo suficiente, ni siquiera a tus padres — Cerró los ojos, recordarlo siempre le daba algo de rabia, sin importar los años que pasaran.

— Mi madre me trataba muy bien en su momento, pero luego se fue, al final nada de lo que vi era real — negó la cabeza — Igual ¡tienes razón! mi padre es mi padre, no debería estar dudando de él así... ha sido muy bueno conmigo — miro a un lado pensando como ojala ella hubiera sido más buena con él...pero ya no había nada que hacer.

Lo observó y frunció el ceño — Pues para mi lo eres, no cuestiones mis palabras... Además yo tampoco lo soy e igual me hablas — tsk, ahora entendía porque los demás la veían como insufrible, el chico en ocasiones le hacía pensar en si misma, no le gustaba eso (?

—... Buena pregunta. La verdad nunca he estado en una nube ¿como puedo saber si es suave? ¿tal vez es porque parece algodón? siento que no debe ser como imaginamos, aparte según entiendo las nubes no son solidas — preguntas importantes, claro que si(?

— Si, tiene sentido, si no te bañaras se notaría...hice una pregunta algo tonta — rodó (? para estar un poco mas cerca de Dylan.

— Puedes contar conmigo cuando toque explorar en lugares con gran cantidad de agua, puedo tomar tu lugar si te toca esa zona — Alzó su pulgar como hacinedo saber que puede ser su guarda espaldas con ese gran enemigo, el agua profunda(??

Se quedó meditando unos momentos.

—No sabría responderte, no llegué a conocer bien a mis padres. Aunque sí, supongo que nunca conoces a nadie lo suficiente —Mencionó con brevedad, recordando los pocos recuerdos que aún vivían en su mente pese a las lagunas mentales.

Se mantuvo escuchando sus palabras, asintiendo de vez en cuando en respuesta.

—Qué cabrona tu madre. Al menos tu padre ha sido benévolo, eso es bueno—Sintió una leve tranquilidad ante la mención del padre, al menos no resultaba ser una persona repulsiva —Hm... Creo que mis padres eran decentes. Mi madre era muy estricta y fría, ¿Aunque me mimaba demasiado...? y mi padre era hombre más calmado del planeta. No sé a quién salí, creo que soy adoptado.

Alzó la mirada, recordando vagamente el aura dorada de su madre, característica que más recordaba entre ambos y que más se asomaba en sus sueños.

Rodó los ojos ante el comentario levemente altanero de Su Hua, aunque no podía debatirle en contra, de todas formas era de las pocas personas con las que hablaba cómodamente dentro del grupo, la compañía de la misma no le desagradaba.

— ... Es cierto —Esbozó un semblante de impresión —¿Quizás sea porque se siente como algodón como dices? Ooh, nunca me he echado encima de algodón, de repente me apeteció hacerlo —Reprimió un mohín de fastidio, porque posiblemente no encontrarían algodón en el abismo como para comprobar sus teorías —Quizás sean como trampolines también, hm...

Le hizo una señal a Su Hua de que dejara de rodar para acercarse a él, puesto que iba a imitar su misma acción: recostarse un momento en el pasto. Fue así que se apoyó con ligereza y terminó estando boca arriba observando la profundidad del cielo.

El dolor en el abdomen se había agudizado por la posición, por lo que flexionó un poco las piernas y apoyó uno de sus pies en su rodilla, logrando una posición adecuada.

—Oh... No es necesario... —Comentó con algo de pena, no quería depender de alguien por un miedo de ese estilo. Generalmente lograba adaptarse rápido a menos que se encontrara en un espacio muy amplio de agua. Meditó otro momento —... Bueno, si son aguas profundas te pediré el favor, si tanto insistes... Ah, el pasto se siente agradable ✨ —Comenzó a rodar un poco también. (???)

No quiso comentar al respecto, a pesar de tener la mente nublada algo le decía que comprobar lo obvio era innecesario.

— Lo fue, el baile, los tratos lindos, todo eso era para poder usarme luego y no haber sido una cagada en su carrera. Pero al final fue capaz de seguir sus malditos sueños...Ojala se pudra en el infierno luego de esto — Hizo una mueca al pensar, ni siquiera se notaba una pizca de arrepentimiento en lo que acababa de soltar — Suena a que eran buenas personas — Se preguntaba que hubiera sido de una vida donde Dylan y ella hubieran sido amigos normales y conocían los padres del otro...Obviamente era un escenario difícil de imaginar, por lo que lo descartó rápidamente de su cabeza.

— Ojala hubiera un ...¿Jardín? pfff no puede ser que ni siquiera sepa como se llamaría cuando mi padre se especializa en botánica. Que mala hija soy — ¿Era momento de sentirse una mierda de hija? era momento, si. Apretó sus labios porque venía venir las lagrimas en cualquier momento, otrospensamientosotrospensamientos... algodón, algodón suave ¿las tetas de Atreia se sentiran suaves?... solo bastó eso para que su tren de pensamiento volviera a ser feliz(?

Dejó de rodar cuando este le indicó viendo que se unía a la misión de llenar su cuerpo del olor del abismo por medio del rodamiento sin sentido

— Jeje si, dejame ayudarte, así nadie sabrá tu secreto y la vez tendré como manipularte — soltó un "ugh" seguido de una mueca — es broma...¡Oye! no ruedes sin mi — Se fue a rodar con él(?

Se quedó pensativo respecto a eso, suponía por el tono de Su Hua que aquello que había soltado lo hizo totalmente con rencor, habiéndole indicado la posible gran herida que guardaba por ello. Realmente no entendía a algunos adultos, parecían ser que pensaban con todo menos con la cabeza, esperaba que se pudriera en el infierno también.

Encogió sus hombros, sin dar más detalles de sus padres, de todas formas, no los recordaba del todo.

—Un olvido lo tiene cualquiera, tienes un tremendo dolor de estómago y la mente en otro sitio, claro que no te vas a acordar —Le reprochó, aún convencido internamente de que Su Hua no resultaba ser tan mala como decía —Un jardín. Ok. ¿Decías?

Había rodado un par de veces hasta quedar nuevamente boca arriba, mirando lo más alto y despejando su mente.

—¿Cómo que manipularme? —Por ese tipo de cosas odiaba contar partes de sí mismo, no quería que otros tomasen ventaja de aquello, no otra vez —Si lo llegas a hacer, voy a aprovechar cada desventaja en grupo para tirarte a la muerte. Un peso menos para mi.

¿Realmente era capaz de hacer aquello con quien había entablado ya un vínculo aunque sea pequeño? En absoluto. Sólo eran palabras amenazantes y vacías al mismo tiempo... o eso creía de momento.

—Ja, te estoy ganando ✨ —Retomó el ruedo. (?)

Asintió, tenía razón, tal vez solo estaba siendo muy dura consigo misma, aun así habían cosas que sabía que había hecho mal y no podía solucionar, pero ¿qué podía hacer ahora? tal vez...Tal vez debería reconsiderar y mandarle una carta a su padre antes de que sea demasiado tarde, a pesar de haber dicho que no lo haría.

— Un jardín de algodón — terminó por decir, pensando en la suavidad de una cultivación gigante de algodón, ni siquiera sabía si su visión era correcta, pero en ese momento cualquier pensamiento se desviaba a cualquier cosa, saltaban más que ella misma en un estado normal.

— ¡Era broma dije! No podría manipularte, nunca le haría algo así a un amigo...Después de todo te conté lo que me hizo mi madre ¿No sería incongruente hacer lo mismo? o tal vez no...hmmm — Se quedó pensando en eso, la gente es muy rara después de todo, podrían vengarse en base a otros.

— ¡Intenta matarme! enano enclenque. No, no me ganaras — rodo hacía el para chocarlo, como si una carrera de mario kart se tratara(??

Detuvo momentáneamente sus vueltas y pensó en lo del jardín de algodón, mirando hacia cierto punto del cielo que apenas alcanzaban a ver, se imaginó un bonito escenario de nubes de algodón. Un lugar bastante pacífico, como siempre le había gustado.

Espontáneamente, soltó un poco de aire de la nariz con gracia y cerró los ojos, si se imaginaba un poco aquel escenario podría ser feliz un par de segundos. Y así fue. Se mantuvo así un par de segundos muy breves e imperceptibles.

—Es como... —Meditó un poco — ... —Frunció levemente el ceño, hasta que la bombilla imaginaria encima de su cabeza volvió a encenderse —¿Trampolines? Puedes saltar en ellos, haha. Y hay muchos árboles trampolines...

Había estado escupiendo una serie de palabras que no se lograban entrelazar entre sí. Instantáneamente los párpados comenzaron a pesarles bastante, el dolor de estómago apareció paulatinamente, comenzando por un dolor apenas perceptible. Ignoró esto último.

Soltó unas pocas risas por lo bajo, hasta escuchar la palabra amigo por parte de Su Hua. Volteó la cabeza hacia la susodicha, volviendo su cara como un total poema mientras la miraba.

—Qué.

¿Por qué sentía que esas palabras eran famil-? Oh, cierto, la situación era como un deja vu. Las neuronas no tardaron en fundírseles por completo.

—Ah, sí, sí, sisisisisi —Dijo lo primero que se le vino a la mente, aquello por algún extraño motivo lo había sacado del trance drogo y al mismo tiempo le habían puesto bastante ansioso —Ok.

Tras unos segundos de silencio, su mente volvió a la vida.

—Supongo que estamos a mano, qué molesto —Diciendo eso, sintió el choque de la contraria en su costado y procedió a hacer lo mismo —Estás drogada, blehhh. 👅

La idea de trampolines sonaba bien, imaginar como podía saltar en una superficie suave era ¿agradable? No lo sabía, pero su imaginación le indicaba que si.

— Suena genial. Ojala saltar en trampolines — soltó una pequeña risa frunciendo luego un poco el ceño al sentir el dolor de estomago que obviamente no se iba al haber tomado la medicación incorrecta.

Al sentir la mirada en ella simplemente pudo ladear la cabeza, sin comprender por que le estaba observando de esa forma.

— Queso — Obviamente en aquel estado solo podía responderle con una incoherencia, en su vida se imaginaba que aquella palabra le causaba tanto conflicto al menos, porque incluso para ella, que era una persona tan cerrada, podía ser capaz de reconocer cuando alguien era su amigo, y para ella Dylan lo era, por sobre el resto del grupo de descenso, aunque no lo admitiría de la forma que lo había hecho en aquel momento.

— BIen, a mano, me parece bien, sisi, muy bien — Orden, si había orden en su relación entonces no había problema, lastima que las relaciones sean tan inestables por eso le daban tanto miedo.

— Tú también — usaría su dedo indice para pokear el hombro de Dylan solo por molestar — Aunque todo es mi culpa por confiar en el idiota uni ojo — frunciría el ceño mientras seguía pokeandolo(?

—... ¿Queso...?

La imagen de su mente le hizo sentir más el dolor de estómago al imaginárselo. Se arrepentía de no haber traído un par de emparedados con queso en el viaje, aunque luego de pensárselo mejor no, porque posiblemente estarían vencidos y sabiendo a mierda a esas alturas.

Su mente volvió a divagar en cosas mínimas, le echaba la culpa a la droga de antes. Volviendo al tema de las amistades, se sentía un poco extraño respecto a esa etiqueta, por lo que optó por darle igual a ello, mientras menos le prestara atención y esperara ello, menos desilusiones y pérdidas tendría a largo plazo. Si no le tomaba cariño a las personas era mejor desde su punto de vista.

Cerró los ojos nuevamente, esta vez sintiéndose mucho más somnoliento que antes, dando un gran bostezo antes que echarse una pequeña siesta. Dejó paulatinamente de escuchar a Su Hua, sin embargo, el pokeo de la contraria volvió a despertarle.

—Hm, supéralo —Gruñó respondiendo con total descaro, porque él no había superado ello y aún mantenía intactas las ganas de patearle las bolas al tuerto. Volvió a bostezar —Nos tendrá luego que... hacer... muchso empsaredafos y fduiekw ewwa........

No aguantó más, volvió a cerrar los ojos y bajó la voz poco a poco hasta dormitar.

— Ahora menos lo superare — Lo dice para seguirle la contraria, no le gustaba haber bajado tanto la guardia, pero bueno ¿era lo normal no? ¿por que desconfiar de sus guías?... aunque, son gente desconocida, debería desconfiar más...

— ¿Muchos qué? ¿Dylan? — se giró para ver al chico, notando que al parecer se había quedado ¿dormido? que manera tan extraña de dormirse en segundos básicamente.

Se giró un poco y se quedó mirándolo, tan tranquilo que le daba sueño a ella también, una parte de ella le hacía sentir que quedarse dormido no era la mejor idea, no recordaba por qué, pero no podía batallar con sus parpados, tan pesados y cansados por la situación, le pedía que se dejara llevar y se durmiera también, descansar para dejar pasar el dolor de estomago y todo lo malo...— buenas noches, descansa — murmuró soltando un bostezo también, terminando por caer igual.