Tras haberse separado del beso, le era tan simple como tan sólo observar a Chenge y el cómo éste reaccionaba, analizar los cambios que observara como el color de sus mejillas que incrementaba y su falta de respuesta verbal, aún cuando pareció haber tenido la intención de mencionar algo. Ladeaba su cabeza curiosa ante todo eso que veía diferente, en espera de una respuesta.

Y en eso era llevada en brazos, a lo que respondió con risas y con sus brazos rodeando el cuello del otro. — ¿Iremos de paseo? — Preguntaba con suma inocencia, sin tomar a consideración que se supone que todo lo que involucraba su acción tenía que hablarse, plantearse y discutirse de cierta manera. Porque ambos estaban en el abismo y, por el momento, para ella y la continuación de su descenso, ya era un punto muerto del que no se obtendría un final feliz.

Así que sólo se dejó llevar por él, moviendo infantilmente sus piernas como si de un juego se tratara.

Aun no era capaz de decir nada al respecto, incluso con la pregunta simplemente asintió. Tal vez una parte de él imaginaba que a estas alturas podría haber reciprocidad, sin embargo la negatividad siempre estaba por delante, así que se podría considerar ¿sorprendido? vaya que si. Ya estando un poco mas lejos la bajó de su agarre, dejando que pusiera los pies en el suelo, cosa que el no sentía que tuviera en ese momento.

— ¿qué... ejem qué significó ese beso para ti? — Seguía dudando de todo, quería tener una respuesta clara, esas típicas respuestas de Ravi de muchas palabras que explicaban lógicamente que había pasado, por un momento sintió que sus papeles se intercambiaron.

Tras la respuesta silenciosa, lo único que le siguió fue tararear un poco, moviendo apenas su cabeza con el ritmo, en lo que el otro decidía hasta dónde era suficiente caminata. Con el ademán de bajarla, se acomodó para ello hasta quedar de pie frente a él, con una amplia sonrisa en su rostro y su atención completamente puesta en la pregunta que era formulada.

— Bueno, un beso en los labios es un acto de contacto físico que tiene como propósito externar interés, atracción y/o deseo emocional y sexual. Se da a un individuo con esos motivos específicos ya que esa es su razón de existencia en ambientes sociales. — Le había pedido el significado del beso, y ese era de la manera más teórica posible. — ¡Así que significa la reciprocidad de tu amor romántico, claro! — Soltaba unas pequeñas risas al finalizar de decir eso, como si fuese algo bastante obvio que el contrario no había comprendido.

— Claro, eso es lo que significa — Más claro no podía ser, no había manera para negar aquello, así que solo pudo sonreír, sonreír ampliamente y reír un poco. No era el mejor momento ni la mejor situación, estaban en el puto infierno pero ¿que más daba? Le había dado un visto bueno a sus sentimientos, no podía no estar feliz por eso.

Se acercó a ella y esta vez fue él que tomó el rostro de Ravi para levantarlo y así depositar un beso mas largo del que ella le había dado, pero manteniendo esa suavidad, una ternura y felicidad que no se podía explicar con palabras.

— Soy feliz, muy feliz — susurró aprovechando para darle otro más y otro, abrazandola luego y apretandola ligeramente. Podía morir ahí mismo y le daba igual, la felicidad seguía ahí, aunque esperaba poder disfrutarla aunque sea un poco.

Asintió con la cabeza cuando el otro afirmó ahora haber comprendido el significado de ello, ¡quién lo diría! Ahora era ella quien tenía que explicarle algo a él para que lo entendiese. Era una situación algo graciosa, e incluso él había parecido reír un poco también.

Dejó que la besara sin queja alguna, ese y los siguientes, y para cuando la abrazó, ella correspondió. — ¿Lo eres? ¡Eso es bueno! — Al menos sabía que la felicidad era algo bueno claro, aunque la noción de estar feliz era un estado intrigante a su parecer. Casi como si fuera un concepto algo fantasioso.

E hizo lo que siempre hace, imitar lo que Chenge hacía con ella. Así que le devolvió la misma cantidad de besos que había recibido, dados de la misma manera a como el otro se los había dedicado.

— Si, lo soy ...¿tu lo eres? — Imaginaba que ¿si? o ¿realmente entendía lo que significaba que acababa de pasar? Con lo honesta que es Ravi no creia que le mentiría con algo como esto ¿verdad?

Sus pensamientos fueron interrumpidos por como Ravi le devolvía los besos de antes, haciendo que calmara un poco toda esa negatividad y nerviosismo al asunto. Volvió a subir un de sus manos a la mejilla de la chica, fijándose en aquellos ojos Ambar, tan brillantes y deslumbrantes como el sol, volviendo a aprovechar la situación para juntar sus labios con los de ella, esta ves dando pequeños besos consecutivos, esperaba no agobiarla, pero dudaba tener mucho tiempo para poder disfrutar el tiempo así con ella.

¿Ella lo era?

— ¿Qué involucra ser feliz? — Preguntó con suma inocencia en sus palabras. Pero eso entraba en el cúmulo de cosas que no comprendía, así que por el momento hablaría de las que si. — De lo que tengo certeza es ¡que es agradable estar aqui! Y que me es placentero dedicarte el contacto físico específico para cuando se tiene un vínculo romántico.

Se apegaba a la mano que estaba posada en su mejilla, mirándolo cuando él lo hacía. — Ahora mismo me encuentro rodeada de cercanía que encuentro ilógicamente suave al tacto, y conceptos y vivencias agradables de presenciar incluso tomando a consideración el ambiente mortífero del abismo, ¿es eso lo que involucra la felicidad?

Se quedó pensando unos momentos, como si hubiese recordado algo. — ¡Ah! ¿Ser feliz es esa sensación física de pesar menos a pesar de que tu masa corporal sea exactamente la misma? Eso lo sentía cuando volvías con vida del abismo, o cuando volviste a ir al orfanato de nuevo, ¡también ahora! — Cuando casi ocasiona algo terrible por guiarse por esa impulsividad que tanto "juzgaba" de las personas.

Esperó que ella se explicara antes de decir cualquier cosa. Mientras hablaba acariciaba suavemente sus mejilla, fijándose en su rostro, intentando mantener la atención en sus palabras, después de todo aun estaba un poco en la nebulosa (?

Asentía y sonreía suavemente, parecía que si, había felicidad en todo lo que estaba ocurriendo.

— Se podría decir que sí, todo eso involucra felicidad — Lo siguiente era una sorpresa agradable, ella era feliz de verle siempre que volvía sano y salvo, no deberia sorprenderle pero, la manera en la cual lo explicaba era bastante adorable.

— ¿hago que peses menos? tal vez por eso es tan fácil cargarte — bromeó un poco, pegando su frente con la de ella — Yo también me siento liviano, y como el estómago me molesta por la felicidad, las famosas "mariposas en el estómago" No es literal pero, es una buena manera de describirlo —

Se separó para besar la frente de Ravi — Te amo — le gustaba decirlo.

Ya le había dado confirmación de que aquellos pensamientos y sensaciones realmente estaban involucrados en un concepto tan amplio y abstracto como lo era la felicidad, incluso si era de manera parcial. ¡Lo estaba comprendiendo! Aunque fuese poco a poco, su investigación y desarrollo comenzaba a dar sus frutos.

— Gasp, ¡tal vez sea por eso! — Porque claro, por mucho que el otro bromeara con suma claridad, ella tomaría el comentario de manera literal. — ¿El estómago te molesta? — Entendió que lo de las mariposas no era literal, pero ¿significaba que la felicidad también causaba sensación de enfermedad?

Escuchó de nuevo esa declaración. Pensaba que era como cuando expresaban el haberse extrañado mutuamente por motivos de la vida.

Aún si no comprendía de todo el concepto, ¿era acertado responderlo? ¿Podía resumir todo lo que entendía y todo lo que no bajo esas palabras? — ¡Te amo! — Y estaba totalmente atenta a su reacción, a su respuesta a esa afirmación devuelta. ¿Sería positivo? ¿Es eso lo que se hacía?

— Un poco, pero no es nada de que preocuparse, es normal. Son como cosquillas, recordándome lo bien que me hace sentir estar a tu lado — A pesar de que era un tipo con cara de agotamiento continuo, podía ser un cursi de mierda siempre que se lo proponía (?

Cuando escuchó el te amo por parte de Ravi tuvo que mira un poco hacia arriba, como conteniendo la felicidad latente en su corazón que parecía enloquecer, esas palabras son las que soñaba aquel niño de 14 años que tanto miraba a la chica que tenía en frente. Suspiró.

— Te escuchas tan adorable diciendo eso, me encanta escucharlo — Sonrió y busco las manos de Ravi para tomarlas y entrelazar sus dedos con los de ella.

— Deberíamos volver, de por si fue bastante extraño lo que hice. Tienes que ir a cuidar a Steve — su sonrisa aguantaba cierta risita, el nombre que le puso la chica le causaba cierta gracia.

¿Era normal sentirse enfermo en situaciones así? Se preguntaba a qué se debía, ya que el otro lo catalogaba como un síntoma "normal" del momento. ¿Acaso él conocía aquello debido a su antiguo vínculo amoroso de hace años?

Estaba a punto de refutar el que la risa de las cosquillas eran una respuesta involuntaria del cuerpo al verse sometido a cierto estrés, se notó en cómo separó sus labios para hablar, pero Chenge mencionó "lo bien que me hace sentir".

Era extraño, confuso y curioso. ¿Por qué usaba descripciones de algo malo para definir algo bueno? ¿O viceversa? ¿Esas contradicciones eran típicas en esa clase de temas abstractos y subjetivos?

— Si dices que es bueno, ¡entonces está bien! — Si, porque si él decía algo como eso, no tenía motivos para refutarlo. Él es quien le explicaba esas cuestiones, porque él era el que sabía cómo funcionaban esos temas.

Amplió su sonrisa ante las palabras que escuchó, y correspondiendo el cómo se tomaban sus manos. — Si te es agradable escucharlo, entonces será un recordatorio diario. ¡Como la proximidad física! ¡Así que te amo! — Y ahora imitó el beso en la frente de momentos atrás. Porque no es que su extraña e incomprensible empatía le alcanzara para "que le naciera decirlo". Lo que hacía era añadirlo a su rutina. De esa manera ella se acostumbraría, lo haría recíproco, y sería parte de su día a día cuando él estuviera presente.

— ¿Extraño? — No tenía la menor idea a qué cosa en específico se refería. — ¡Es verdad! Tengo que cuidar de Steve. — Aún con sus manos unidas, pareció indicar el dar unos pasos de regreso a con los demás.

Sentía que algunas cosas no las lograba captar del todo, pero bueno, era cosa de ir sobre la marcha en este poco tiempo que podrían disfrutar juntos, después de todo aun no sabía si llegaría a seguir con ellos o no. Aquel momento era un trago dulce entre la amargura de la situación.

Lo siguiente que hizo fue simplemente reírse, pero no porque le hacía gracia, si no que era tan adorable que la felicidad solo le hacía reaccionar de esa forma — Estaré muy feliz de recibir todos los te amo de tu parte, mi dulce Ravi — Volvió a darle un pequeño beso en los labios, quedándose un momento mirando el rostro de la chica ¿sería capaz de decirle adiós? y Su Hua... Tuvo que mirar a otro lado, porque el nudo en la garganta le estaba empezando a molestar.

— Si, hay que cuidarlo, yo te ayudaré, vamos vamos — Dijo de forma apresurada para seguir los pasos de Ravi, no quería pensar demasiado, o simplemente volvería a la mala costumbre de agobiarse, no quería eso.